Fotografía


ORÍGENES DE LA FOTOGRAFÍA

Actualmente la fotografía es un elemento completamente integrado en nuestro sistema cultural y que a través de sus distintas modalidades condiciona buena parte de los contenidos sociales y culturales de nuestro tiempo.


        Sin embargo, hasta alcanzar el actual grado de desarrollo, la fotografía ha experimentado, una evolución compleja y espectacular, íntimamente relacionada con los avances técnicos y los procesos sociales acaecidos durante los últimos 170 años.



       A lo largo de todo este tiempo, la fotografía ha conseguido convertirse en uno de los principales vehículos de información, así como en un medio de expresión autónomo, que lejos de rivalizar con las restantes modalidades artísticas, las ha completado, enriquecido y liberado, favoreciendo el desarrollo de un sentido autónomo para el arte.

      No existe actividad humana, profesional o lúdica que no la utilice hoy en día, es indispensable para la ciencia y para la industria. Al igual que ocurre con la mayoría de los descubrimientos técnicos. La aparición de la fotografía en el primer cuarto del siglo XIX no puede entenderse aisladamente, sino como consecuencia de la acumulación de conocimientos técnicos que se ordenan en torno a una situación sociocultural favorable.

     Buena prueba de ello es observar como la fotografía hace su aparición de modo casi simultáneo en distintos puntos de Europa, donde, a través de distintas experiencias, se encuentra solución a los problemas técnicos que ésta ofrecía

ORIGENES Y ANTECEDENTES DE LA FOTOGRAFIA.

    Previamente al descubrimiento de la fotografía existe ya un conocimiento bastante profundo acerca de la cámara oscura y de los compuestos químicos.

   Durante el s. XI varios científicos árabes realizaron algunos primitivos experimentos  con cámaras oscuras que construyeron a base del sólido material de sus tiendas.

      El descontento del público con la pintura, no como arte, sino como medio de recrear la acción, impulsó la experimentación con nuevos métodos. Desde siempre, la gente se sentía fascinada por la forma en que la luz se comportaba.

     Se descubrió que cuando la luz pasaba a través de un pequeño agujero a un cuarto cerrado, reflejaba una imagen del exterior, como por ejemplo un paisaje, en una superficie dentro de la habitación. El problema consistía en que la imagen aparecía invertida. Esto era causado por una de las leyes de la luz, que hace que las imágenes se inviertan en un plano de visión estrecho, tal como sucede en el ojo humano.

    Este es el principio de la cámara oscura, que ya se aplicaba para la observación de los eclipses solares. Hacia 1515, Leonardo Da Vinci, da en sus apuntes una descripción minuciosa de la cámara oscura y no limita su utilización a la observación del sol.


    Los profesionales se interesaron por el comportamiento de la luz cuando pasaba a través del cristal; y en 1550, el milanés Girolamo Cardamo añade a esta cámara un "disco de cristal", probablemente la primera lente para ayudar a enfocar la imagen Este aparato, una caja con abertura, objetivo y papel, se denominó la "cámara oscura".

    Estas cámaras podían llegar a ser tan grandes como una habitación. Poco después se hicieron móviles, ya en el siglo XVII, el astrónomo Kepler disponía de una tienda portátil que giraba sobre si misma.
     Durante el siglo XVIII, se produjo el auge de los retratos, sobretodo de los perfiles y las siluetas. Esta técnica, que consistía en recortar el perfil de una persona en papel negro acharolado data de la época de Luis XIV. Las siluetas se difundieron rápidamente por Alemania y Gran Bretaña y, de aquí, a los Estados Unidos.

   En 1786, Gilles-Louis Chrétien, inventa el physionotrace, especie de pantógrafo del modelo que luego se retoca con aguatinta. Esta técnica que combinaba la silueta y el grabado y no requería del modelo largas sesiones, no era muy costosa y sustituía a la miniatura en su papel de retrato familiar.

       El problema de la imagen captada por la cámara oscura, era que no quedaba fijada a menos que se dibujara. La solución llegó a finales del siglo XVIII, cuando se produjo un avance con el descubrimiento de la sensibilidad a la luz de las sales de plata de ley.

       En 1802, Thomas Wedgwood, hizo el papel sensible a la luz impregnándolo con una solución de nitrato de plata, la imagen que pasaba a través del objetivo quedaba como una imagen negativa e invertida. Obtuvo con dicho papel reproducciones de diversas plantas, poniendo estas sobre el papel y exponiéndolas a la luz; sin embargo, no logró fijar permanentemente las imágenes, ya que solamente duraban un cierto tiempo. Pasados unos años se comprobó que la desaparición progresiva de este negativo podía evitarse si se sumergía la fotografía en agua salada. Años más tarde J. F. W. Herschel, halla la solución para la fijación de las imágenes fotográficas.

Cronología:

1521: La primera publicación sobre la cámara oscura es la de Cesare Cesariano, un alumno de Leonardo durante el Renacimiento. Por su parte, el científico Georgius Fabricus experimentaba ya con las sales de plata, notando algunas de sus propiedades fotosensibles.


1558: Giovanni Battista della Porta, por sus publicaciones sobre el funcionamiento de la cámara oscura, se hizo popular entre los pintores de la época.



Girolamo Cardano, matemático italiano, que publicó la famosa obra científica Ars magna, sugiere una importante mejora: una lente en la apertura de la cámara.


          Sin embargo no sería hasta el s XVII cuando la cámara oscura comience a utilizarse con fines prácticos. Se comienza entonces a la fabricación de cuartos móviles.

1600: durante el siglo XVII, la cámara que hasta ese momento era una habitación como tal se transforma en un instrumento portátil de madera.

Johann Zahn, considerado el escritor e ilustrador de la cámara oscura más prolífico, transformó esa caja en un aparato parecido al usado en los principios de la fotografía en 1685, aunque sería casi 150 años antes de que la tecnología llegara a un punto en que fuera posible construirla.


        En este siglo los científicos continuaban experimentando con sales de plata, notando cómo se oscurecían con la acción del aire y del Sol, sin saber que era la luz la que les hacía reaccionar, hasta que científicos como el sueco Carl Wilhelm Scheele y el suizo Jean Senebier revelaron que las sales reaccionaban con la acción de la luz.

1685: de acuerdo a tratados publicados por Zahn, la cámara ya estaba lista para la fotografía; pero todavía no se podían fijar las imágenes.


      Respecto a los productos químicos que más tarde serían empleados en la fotografía, entre 1725 y 1777 se producen bastantes estudios acerca de las soluciones de nitrato y cloruro de plata y su sensibilidad a la luz.

1777: el sueco Carl Wilhelm Scheele publica su tratado sobre las sales de plata y la acción de la luz, en latín y alemán; en 1780 en inglés, y un año más tarde en francés. Al igual que otros químicos de su época  habitualmente trabajó en condiciones muy peligrosas. También tuvo el mal hábito de probar los productos químicos que descubría, y al parecer, ésta fue la causa principal de su muerte debido a un envenenamiento por mercurio.


       Por otro lado, en el estilo de las pinturas de artistas exitosos de este siglo como Canaletto parece evidente el uso de esta poderosa herramienta, la cámara oscura.


    El fisionotrazo para hacer perfiles, inventado por Gilles Louis Chretien, despertó en la burguesía francesa el apetito por la iconografía. Es un instrumento óptico mecánico operado manualmente.


      Fue utilizado a lo largo del siglo XIX como una máquina de dibujo capaz de trazar los perfiles de objetos y modelos sobre láminas de cobre. Se basaba en un instrumento anterior denominado pantógrafo, diseñado para aumentar o disminuir con precisión dibujos de planos y diseños.

      Consistía en un sistema de paralelógramos articulados capaces de desplazarse en un plano horizontal. Con ayuda de un estilete seco, el operador seguía los contornos de un dibujo. Un estilete entintado seguía los desplazamientos del primer estilete y reproducía el dibujo a una escala determinada por su posición relativa. Dos puntos principales distinguían al fisionotrazo.

    Aparte de su valor poco común, se desplazaba por un plano vertical y se hallaba provisto de un visor que, al reemplazar la punta seca, permitía reproducir las líneas de un objeto, ya no a partir de un plano, sino de un espacio.

    Tras haber situado el modelo, el operador, subido a un taburete detrás del aparato, maniobraba observando a través del visor los rasgos que deseaba reproducir Faltaban pocas décadas para la invención de la fotografía.


       El fisionotrazo ha sido considerado en algunas ocasiones como un antecesor manual de la fotografía. Debido a su diseño este instrumento resultaba adecuado para la realización de retratos en perfil otorgando a las placas obtenidas un aspecto característico.


1801: Se sabe que los primeros experimentos realizados con la intención de obtener imágenes empleando materiales sensibles a la luz, los llevan a cabo Thomas Wedgwood y Humphry Davy en Inglaterra hacia el año 1800.

       Ellos consiguieron obtener siluetas muy similares a los actuales fotogramas, colocando objetos opacos sobre un papel sensibilizado con nitrato de plata, pero las imágenes desaparecían al paso del tiempo. En realidad no se puede hablar de verdadera fotografía hasta que no se alcanza un registro permanente de la imagen.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------



CREADORES DE LA FOTOGRAFÍA
            La fotografía como arte práctico, comenzó en 1831 con la invención de seis experimentadores: Joseph Nicephore Niépce, Louis Jacques Daguerre, William Henry Fox Talbot, J.B. Readi, Hippolyte Baryard y sir John Herschel, aunque el reconocimiento de la invención de la fotografía recae, generalmente en tres de esos seis hombres: el francés J. Nicephore Niépce, el inglés William H. Fox Talbot  junto con otro francés llamado Daguerre. Naturalmente, esto generó disputas entre franceses e ingleses.
Niepce. Las heliografías y la primera fotografía.

        Sobre 1816 consigue las primeras imágenes sobre papel mediante una cámara oscura que utiliza como objetivo la lente de un microscopio solar (imágenes invertidas y fijadas parcialmente), esto lleva a que comience a trabajar sobre los llamados “dibujos heliográficos”, imágenes de grabados u otras copias de línea sobre vidrio, papel o metal.
           
      Estos dibujos posibilitan a Niépce continuar con sus investigaciones, centrando si interés en las sustancias sensibles a la luz y su fijación, dejando de lado parcialmente aspectos relativos al propio registro de imágenes.
           
          Hacia 1826 consigue aplicar los recientes descubrimientos acerca de los compuestos sensibles a la luz al registro de imágenes permanentes. Estos dibujos posibilitan a Niépce continuar con sus investigaciones, centrando su interés en las sustancias sensibles a la luz y su fijación, dejando de lado parcialmente aspectos relativos al propio registro de imágenes.
    Niépce, que era un profundo conocedor de la técnica litográfica, consiguió fijar definitivamente las imágenes de la cámara oscura en 1826 cuando consigue la primera fotografía realizada con una cámara rudimentaria sobre una lámina de peltre (aleación de cinc, plomo y estaño) recubierta con una sustancia bituminosa, tras ocho horas de exposición apareció una imagen positiva y directa, consecuencia de la disolución del producto no endurecido por la exposición solar( las zonas de sombra el metal, el betún endurecido y blanqueado conforma las luces intensas y los medios tonos).

          En enero de 1826, Niépce recibe una carta de París de un tal Daguerre, pintor y decorador, inventor del Diorama, variante del panorama creado por el inglés Beker. Se trataba de un escenario giratorio que proponía en una misma sesión tres cuadros sucesivamente, a esto se le añadía un ambiente musical.

Para las perspectivas de los decorados de teatro y los nuevos escenarios del Diorama, Daguerre recurría a la cámara oscura y era cliente de los ópticos Chevalier.
            Tras numerosos contactos, Niépce mandó una heliografía a Daguerre. Más tarde lo visitó y quedó fascinado por el Diorama. Tres años más tarde, en 1829, comienza a utilizar placas de plata en lugar de las de peltre, encontrando un modo eficaz de eliminar el betún endurecido en las luces después de oscurecer con yodo las sombras. Se obtiene así una imagen enteramente en plata.
            En 1829, ambos crearon una sociedad donde se reconocía a Niépce como inventor de "un medio nuevo... para fijar las vistas que brinda la naturaleza sin tener que recurrir a un dibujante." Jaques Daguerre continuará los trabajos iniciados por Niépce a la muerte de éste, en 1833.
          En 1829, tras un prolongado trabajo en solitario, Niépce decide asociarse al pintor       Al igual que Niépce, Daguerre muestra más interés por la obtención de compuestos del máximo de sensibilidad que por las cuestiones relacionadas con el perfeccionamiento técnico de la cámara.
Daguerre y el daguerrotipo.
          Daguerre no aportaba más que un presunto perfeccionamiento de la cámara oscura y prometía mejorar la heliografía.
        Muerto Niépce y partiendo de sus descubrimientos acerca del yoduro observa como vapores de mercurio son capaces de crear una imagen latente en las placas de yoduro de plata que, mediante las disoluciones del yoduro residual en una solución caliente de agua y sal común, se pone de manifiesto.
         De este modo se establece el primer proceso fotográfico, conocido como daguerrotipo y emprende su explotación comercial, en 1839, con la ayuda del gobierno francés.
       Sin embargo, los tiempos de exposición aún son muy largos, lo que supondrá una seria limitación a su desarrollo.
     Aún así, las imágenes obtenidas son muy nítidas y cuentan con un grado de detalle bastante alto. Son obtenidas directamente sobre placas de plata y fijadas mediante tiosulfato sódico. Su tiempo de exposición era de 30 minutos.
         El material fotográfico, al principio era muy caro y sólo al alcance de aficionados pudientes o entidades con fondos. Sin embargo, el entusiasmo popular era grande y, al día siguiente de la comercialización, se improvisaban cámaras hechas con cajas, pero los logros fueron escasísimos.
            Daguerre emprendió la fabricación en serie de su material, asociado con su cuñado, el papelero Giroux. Se vendían las cámaras y todos sus accesorios, pero aun así costaba muy caro (en 1839, costaba unos 400 francos-oro) y era muy pesada, unos cincuenta kilos.
       En 1841 Chevalier lanzó los objetivos intercambiables, y comenzaron a existir cámaras de sólo cuatro kilos, incluyendo los accesorios.
        Poco a poco las cámaras reducen el peso, el volumen y su precio, incluso el tiempo de exposición se acorta. Las mejoras que se fueron produciendo no fueron simplemente ópticas, sino también químicas. Pero el daguerrotipo no era muy perfecto, ya que las imágenes se veían desde un determinado ángulo, era una imagen positiva única.
         Por otro lado el profesor austriaco Ettinhaussen y Petzval, advirtieron el problema que limitaba la utilidad del daguerrotipo, su lente era muy rudimentaria (se necesitaba mucha luz, a efectos “f” actuales, sería una f-17)y comienzan a trabajar sobre el diseño del nuevo objetivo, con al ayuda del óptico alemán Voighlander, crearon el objetivo Petzval, conocido como objetivo alemán, capaz de admitir una luminosidad 16 veces mayor.

     Se empezaron a construir en las fabricas alemanas de Voighlander, con lo cual la producción de daguerrotipos se populariza de modo definitivo, aunque las cámaras más utilizadas no eran el elegante y prestigioso modelo Voighlander, sino otras versiones de firmas diferentes (caja de madera sobre trípode, el fotógrafo ajustaba el enfoque sobre una pantalla de vidrio esmerilado en la que proyectaba la imagen, a continuación lo retiraba sustituyéndolo por una placa sensibilizada.
       Lo importante de la fotografía era el retrato. Los clientes debían quedarse unos veinte minutos a plena luz del día para poder ser fotografiados, pero esto no impidió que la gente lo hiciese y a lo largo de 1840 los talleres de retratos se multiplicaron en las grandes ciudades, pronto se convirtieron en locales muy bien acondicionados para tal acto, como la colocación de una pequeña casita de cristal en azoteas y jardines. 
        Es interesante el hecho de que algunas de las fotografías posteriores fueron hechas en diferentes tonos de color. El color vino, de sangre seca, el ámbar oscuro y el naranja apagado eran algunos de los tintes obtenidos a través del uso de productos químicos elegidos al azar. Estos secretos, sin embargo, cayeron en el olvido durante muchos años. Por lo menos, ahora la gente podía probar que el pasado había existido. Después de todo, la pintura siempre había sido, de alguna manera una ficción, mientras que la fotografía era una imagen idéntica a la realidad, y no idealizada como lo era la pintura, aun en sus momentos de mayor realismo.

Talbot. la imagen multipicable. El calotipo.
            En 1839 descubre un proceso fotográfico completo, uno de los puntos de referencia más importantes para el desarrollo de la moderna técnica fotográfica.Talbot reclamaría su prioridad respecto a Daguerre, en realidad, al margen de la competencia establecida entre ambos, lo cierto es que consiguió definir el proceso fotográfico por un camino diferente del seguido por Daguerre y Petzval.
            En un primer momento empezó a trabajar con cámaras oscuras de gran tamaño, pero advirtió que utilizando cámaras más pequeñas y objetivos de menor longitud focal, el tiempo de exposición de reduciría, al concentrarse la luz captada por la lente en una zona reducida. Se obtenía así una imagen más clara y un registro mucho más rápido. Al no tener medios suficientes desistió, concentrando sus esfuerzos en la obtención de materiales suficientemente sensibles como para poder trabajar con cámaras de mayor tamaño. A partir de este momento, comienza a trabajar sobre imágenes negativas como paso previo al desarrollo posterior del positivo, cosa que logró en 1839.
            El proceso utilizado por Talbot para la obtención de imágenes positivas se basa en un papel emulsionado con nitrato de plata y yoduro de potasio. Inmediatamente antes de exponerlo a la luz, se vuelve a sensibilizar este papel con una solución de nitarto de plata y ácido gálico. Después de la exposición a la luz, se forma una imagen apenas visible. El negativo, una vez seco, se revela con nitrato de plata y ácido gálico, fijándose con hiposulfito. Luego el papel se vuelve transparente mediante un baño de cera líquida. Con este negativo se saca un positivo por contacto sobre un papel idéntico, sensibilizado con nitrato de plata.
            Talbot lo llamo calotipo, aunque al principio se prefirió la nitidez del daguerrotipo, la imagen sobre papel era más barata y aportaba riqueza de tonos a la imagen, lo que hizo que se impusiera.
Las mejoras se fueron sucediendo:
- Primero fue el calotipo: Este procedimiento fue mejorado, se llegó a reducir el tiempo de exposición a treinta segundos, que en un principio era de treinta minutos. La calidad de la imagen sobre papel tenía suavidad y medios tonos, pero fue Blanquart-Evrard, quien mejoró la calidad del papel colocándolo en la cámara humedecido y sujetado por dos cristales. A estos negativos se les llamó: negativos albuminados. Más tarde apareció el papel albuminado que proporcionaba imágenes de un brillo hasta entonces desconocido.
        Con estos adelantos, Blanquart-Evrard, fundó el primer taller de tiradas fotográficas en serie. La fotografía tomaba carta de naturaleza como documento arqueológico y como ilustración gráfica.
- Segundo, el colodión húmedo: era una mezcla de celulosa nítrica, disuelta en éter alcoholizado con yoduro de plata. Este invento supuso un gran adelanto en la fotografía ya que permitía hacer una instantánea, aunque eso sí, con numerosas dificultades.
- Tercero, la placa seca: el gelatino-bromuro: tras descubrir la placa mojada, los fotógrafos tenían que ir con la tienda de campaña o con el coche-laboratorio si querían hacer fotos en exteriores, hasta descubrirse la placa seca. Este invento de Maddox consistía en una emulsión compuesta de bromuro de cadmio y de una solución de gelatina y de agua en partes iguales; después de sensibilizarla con nitrato de plata, se extendía la solución sobre el cristal y se dejaba secar. Sin embargo este procedimiento era muy arduo y lento, pero en 1874, se consiguió producir en serie.






No hay comentarios:

Publicar un comentario